- RESUMEN SALIDA 11.09.11

Y aquí me hallo, en esta difícil tarea, la de redactar una crónica bajo la alargada sombra de los grandes cronistas de este blog.

En fin...

El día empezó a las 6:40 de la mañana. Suena un mensaje en el móvil que dice así: "...Me estoy metiendo ahora en la cama, las fiestas son así, no me esperéis..." esbozo una sonrisa, dejo el móvil en la mesilla y me acomodo entre las sabanas para caer en los brazos de Morfeo, aun con más gusto si cabe.

Algo más tarde, como cada domingo, inicio el ritual: un desayunito, me visto de romano, cojo la bici y salgo en dirección al punto de encuentro habitual. Según me voy acercando, miro con preocupación el corrillo que forman los miembros del grupo. - ¿Habrá pasado algo? ¿Estarán todos bien? -

El enigma se resolvió nada más llegar a su altura. ¡NUEVA BICI EN LA CASA! sin decir hola, me monto en la nueva cabalgadura y ¡Vaya bicha! Cesítar te lo vas a pasar pipa, ¡que la disfrutes!

Allí se encontraban Cesitar, Javi, Javi risitas, Juan Andrés y Dani.

Tras varios comentarios sobre la maquina, nos disponemos a salir, no sin antes escuchar unas explicaciones de nuestro gran Líder, Dani, sobre lo que debemos llevar (y vamos a hacer) en las rutas, vendas, apósitos y demás aperos para unas primeras reparaciones, esta vez en nuestro cuerpo.

Salimos en dirección a Collado Mediano por los senderos del castillo de Mataespesa, probamos unos saltitos con la nueva Mongoose y continuamos por el depósito hasta Navacerrada pueblo. Una vez allí bordeamos el pantano por el sendero de los tablones (siempre que lo hago pienso en lo chulo que es).

Poco antes de llegar a la presa Javi propone acortar el circuito del campeonato subiendo una rampa más corta... pero más empinada, que raro... y todos decimos al unísono - pues claro, si hay que subir se sube – y hala, platito pequeño y para arriba.

Al coronar la cuestecita, y mientras nos reagrupamos, suena una voz imperante: ¡Que, hoy no se come? Giramos las cabezas a Javi "risitas" - ¡Señor, sí, señor!- nos quitamos las mochilas y sacamos la merienda, haya o no haya hambre. Habla poco pero...

Dejamos algo para luego y continuamos con la marcha. Ya dentro del circuito, y por un sendero que no está hecho para los manillares anchos, con un poco de técnica sorteamos las curvas y piedras que van saliendo a nuestro encuentro para culminar junto a una gran roca, y a bajar imaginándonos a los campeones corriendo junto a nosotros, esta vez con surcos en el suelo hechos a base de frenadas de los bikers.

No tardamos en recorrer los subeybaja del trazado, y llegamos a "la piedra" (un pequeño escalón que se pasa con facilidad. Si, si.) Javi, la supera sin pensar, el que suscribe, detrás, pero sin parar de “pensar”. Cesítar se quedo con las ganas, pero no la bajo por prescripción paterna. Paramos a inmortalizar el momento y continuamos en dirección a Becerril, para cruzarlo y subir al Telégrafo.

En un pequeño sendero, ya subiendo el monte, aparece un tipo con una nena y su mujer, - ¡Hombre David! - Nos alegramos del reencuentro post estival y resumimos un poco las noticias del verano.

Tras la despedida, empezamos la ascensión por la pista, y si el calor y la subida no eran suficientes, un montón de tábanos se recreaban con nosotros a base de picotazos. Aun hoy recuerdo a esos bichos mientras me rasco con las esquinas.

Pero todo sufrimiento se hace leve ante el inicio del "bikepark", como yo era el que mejor se lo conocía inicio el descenso, seguido por Javi y Cesítar. Voy enlazando saltos y curvas mientras oigo tras de mí una voz risueña diciendo - ¡hay va uno... y otro... y otro...! – si somos como niños, no hay como divertirse.

Terminamos los dos tramos y nos dirigimos a Alpedrete por la famosa trialera, (yo no paro de "pensar" mientras me acerco). Javi no defrauda, Cesítar le sigue, con mas control si cabe (suna maquina), el Menda, pichi pichá.

Pero parece que la trialera no perdona ni a las bicis nuevas, pinchazo de Cesítar, el segundo en un ratito, primero pinchó Javi risitas. Reparamos, un empujoncito y en casa.

En resumen, una ruta que se puede repetir, divertida. Cesítar empezó que si sí que si no con la Mongoose, y acabo con la sonrisa tonta y sin querer montar la bici en el coche. Todos enteros, con ganas de más y pensando que, como siempre, lo mejor: la compañía.

Buena semana a todos, nos vemos en la Eternal.

Fdo. Jose Manuel F (Josito)